Con la postura de Fernando Castro, docente de Comunicación Organizacional, Colegiatura participa en la construcción académica sobre la diferencia al acceso tecnológico a la que se enfrenta Latinoamérica en la era más digital, del periódico El Colombiano.

La falta de internet (herramienta esencial sobre todo en tiempos de pandemia) en 40 millones de hogares de Latinoamérica según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), ha limitado el acceso al trabajo y la educación de manera remota. Según Carolina Botero, directora de la Fundación Karisma, el papel que jugará la conexión en una sociedad que se digitaliza cada vez más desde dos puntos de vista: “por un lado, estarán los que podrán tener y usar la conectividad, esos serán quienes tendrán más oportunidades, y por el otro quienes optarán por el derecho a la desconexión como una forma de vida, fenómeno que se podría dar, por ejemplo, en comunidades indígenas y campesinas”.

Sobre el segundo grupo, Fernando Castro, docente de Colegiatura, señala que es cierto que en un futuro la población estará más conectada: “las tecnologías de la comunicación digital son seductoras y crean necesidades, sin embargo, también estará otro porcentaje de desconectados integrado por las personas a las que realmente no les interesa, pero también por aquellos a quienes su capacidad económica no se los permita. La brecha tecnológica de los países que invierten recursos en ciencia, tecnología e innovación es amplia y le apuntan a integrar esos desarrollos tecnológicos a innovaciones sociales y comerciales, Alemania ha abanderado el asunto de la Cuarta Revolución Industrial, Estados Unidos y China lo hacen desde la tecnología aplicada al comercio y las plataformas sociales”. Haz clic para leer el artículo completo